Ingrediente imprescindible en nuestras recetas y bienestar, el limón es un cítrico con múltiples recursos que nos benefician desde todos los puntos de vista. Del limonero, potencia nuestra cocina de mil y una maneras al mismo tiempo que permite que nuestro organismo obtenga sus beneficios para la salud. Para acceder a sus vitaminas, sabor vigorizante y cualidades cotidianas, ¡un método muy simple te permitirá cultivarlo en tu propia casa!
El cultivo del limón es apasionante a cualquier edad, pero es especialmente interesante para los niños. Rica en lecciones, esta experiencia les permitirá aprender mientras se divierten y seguir por sí mismos la evolución de un pequeño limonero. Para hacer esto, solo necesitarás unas pocas semillas y una taza. ¡Descubramos juntos este truco del que no podrás prescindir!
Que necesitarás:
- semillas de limon
- Una taza
- De la tierra
- algunas piedras
¿Cómo consigo un limonero?
Primero, quita el corazón a un limón grande. Lava bien las semillas y colócalas en un recipiente con agua. Déjalos así durante 6 a 7 días pero no olvides cambiar el agua diariamente. Una vez que haya pasado este período, sus pips estarán listos para usar.
Ahora toma una taza para comenzar a cultivar tu limonero. Rellénelo con algunas piedras (suficientes para cubrir el fondo) y agregue tierra húmeda. Las piedras actuarán como un drenaje para cualquier exceso de agua presente en el suelo. Una vez llena la maceta, puedes plantar tus semillas en ella, teniendo cuidado de colocar los extremos hacia abajo y dejando un espacio de unos 5mm entre cada una de ellas. Deben cubrirse con arena o grava. Se recomienda cubrir la copa con una bolsa o lámina de nylon para reproducir un efecto invernadero.
Sus semillas deberán regarse con un rociador de agua durante los primeros 2 o 3 días, luego puede reducir el riego a una vez cada dos días. Después de aproximadamente una semana, deberían aparecer brotes jóvenes en la superficie. Según el tamaño de la taza y la fertilidad de la tierra utilizada, puede ser necesario transferir algunos brotes a otra taza para darles espacio para crecer y evitar que crezcan demasiado.
Cuando estas alcancen un tamaño mayor (entre 3 y 5 meses), puedes elegir las plantas más bonitas y trasladarlas a macetas individuales para que tu limonero crezca a gusto. La composición del suelo no debe cambiar para mantener las mismas posibilidades de crecimiento de su árbol frutal.
Para un ambiente óptimo, coloca tu planta en un lugar soleado y luminoso que no sufra las molestias del frío. Si su experimento es en el verano, asegúrese de colocar su arbusto afuera, riéguelo diariamente y fertilícelo con un fertilizante de cítricos. Este procedimiento es muy importante ya que el limonero requiere de muchos nutrientes para crecer. En cambio, si tu planta crece en pleno invierno, riégala lo suficiente para que la tierra nunca se seque por completo. Si ves caer algunas hojas, no te preocupes, es parte del ciclo de crecimiento.
¡Tenga en cuenta que durante la primavera, debe cortar las ramas para promover el crecimiento de su limonero!
Lo que te da el limón a diario
Más allá de la hermosa planta que obtendrás tras esta experiencia, este árbol te ofrecerá lo más preciado: ¡su limón! Rica en vitaminas y nutrientes, sus beneficios son innumerables y mejoran nuestra salud en el día a día, si nos tomamos la molestia de interesarnos por ella. La revista Femme Actuelle hace un balance de este increíble cítrico y revela algunas de sus virtudes:
Bien por la linea
Excelente diurético, antioxidante y bajo en calorías, el limón favorece el trabajo de los riñones y permite que el organismo se deshaga de sus toxinas.
Reduce la retención de agua
Gracias a su trabajo sobre los riñones, el limón ayuda a eliminar el exceso de líquidos en el organismo. Rico en polifenoles, sería el ingrediente ideal para tonificar los vasos sanguíneos, especialmente cuando se combina con frutos rojos que contienen los mismos tipos de flavonoides.
Ayuda a la digestión
Al estimular el sistema digestivo, esta fruta cítrica ayuda a impulsar el metabolismo al promover la secreción de bilis por parte del hígado. Debido a su contenido de ácido cítrico, regularía el equilibrio ácido-base del cuerpo, ¡especialmente consumido con agua tibia por la mañana!
Protege la garganta
¡Combinado con la miel, el limón tiene una importante acción antiinflamatoria que es particularmente efectiva para la garganta cuando hace frío!