No hace falta mucho para personalizar nuestra casa y hacerla tan acogedora como siempre hemos soñado. Basta con decorarla con el estilo que mejor nos represente, y añadir aquí y allá detalles que no sólo hablen de nosotros, sino que la conviertan en nuestro lugar favorito. Llegar a casa después de un día de trabajo realmente nos da una sensación de paz y serenidad, y si miramos a nuestro alrededor y nos encanta lo que vemos, nuestro estado de ánimo se beneficiará aún más.

Cuadros, fotografías y accesorios de diseño contribuyen sin duda a crear un lugar especial. Pero si hay algo que tiene el poder de embellecerlo todo, es la naturaleza. De hecho, las flores y plantas de interior llenan los espacios sin parecer nunca excesivas o fuera de lugar. Es más, adornan el ambiente con refinamiento y elegancia, y hacen que el hábitat que las rodea sea completo, armonioso y sumamente relajante.

Entre las plantas ideales para espacios cerrados, no podemos dejar de mencionar el lirio de la paz, caracterizado por sus hojas verde oscuro y sus maravillosas flores blancas. Se dice que trae buena suerte y, como su nombre indica, es un símbolo de paz. Cuidarlo y hacerlo florecer como se merece es más fácil de lo que se cree. El secreto está en utilizar un ingrediente específico.

CÓMO HACER CRECER Y FLORECER EL LIRIO DE LA PAZ
El lirio de la paz es perfecto para utilizarlo como accesorio decorativo, pero sabemos que las plantas con flor, por desgracia, tienen un periodo de tiempo limitado.

Esto no significa, sin embargo, que con una nutrición adecuada las flores no puedan durar más tiempo y que la planta pueda seguir creciendo de forma sana y natural para que las flores sigan siendo hermosas y exuberantes con el paso de los años.

Cómo cuidar el lirio de la paz
Para ello, basta con hacer una mezcla de harina de tapioca y agua. Este ingrediente, por cierto, se considera un fertilizante natural y procede directamente del tubérculo de una planta tropical llamada yuca. Entre las sustancias que contiene se encuentran minerales como magnesio, potasio, calcio, hierro y muchos otros.

Para alimentar a nuestro lirio, por tanto, basta con diluir una cucharada de harina de tapioca en 400 ml de agua y mezclar hasta obtener una mezcla líquida.

A continuación, añada más agua, siga mezclando y páselo todo a otro recipiente con ayuda de un colador: este paso sirve para eliminar cualquier grumo.

Uso del abono a base de harina de tapioca
Tras crear nuestro abono a base de agua y harina de tapioca en pocos minutos, podemos proceder a utilizarlo.

Para ello, basta con verterlo en una regadera y pulverizarlo sobre la tierra del lirio, para que las raíces de la planta absorban todos los nutrientes necesarios y crezca sana, bonita y fuerte.

Abono de harina de tapioca
También conviene recordar que el lirio de la paz necesita agua unas dos o tres veces por semana, y que el lugar perfecto de la casa para colocarlo es un sitio a ser posible fresco y no expuesto a la luz solar directa.