¿Está acostumbrado a limpiar su cuarto de baño a diario, pero no consigue deshacerse de esas manchas rebeldes del fondo de la taza? Aunque utilices los limpiadores más populares del mercado y mucha grasa de codo, a veces es imposible conseguir que brillen porque las odiosas manchas ¡simplemente no desaparecen!
Afortunadamente, puedes poner fin a este inconveniente con este ingrediente natural. Es un truco natural y práctico del que no querrás prescindir.
Como los inodoros se utilizan varias veces al día, suelen tener manchas amarillentas o depósitos de cal. Para limpiarlos correctamente, olvídate de los productos industriales que dicen ser súper eficaces, porque la solución está en tu armario. Sólo tienes que abrirlo y coger este increíble ingrediente.
Con ácido cítrico
Para devolver a tu inodoro la limpieza de antaño, coge un bote de ácido cítrico y ponte a limpiar. Este producto es capaz de neutralizar todas las manchas difíciles que invaden tu inodoro.
Mezcle 3 cucharadas de ácido cítrico con ½ litro de agua caliente. Vierta la mezcla en la taza del váter y déjela durante varias horas o toda la noche. A la mañana siguiente, frota con un cepillo para inodoros y tira de la cadena.
Con vinagre blanco
Gracias a su acidez, el vinagre es uno de los productos de limpieza más eficaces para diversas superficies del hogar, como azulejos, fregaderos y encimeras. De hecho, es el ácido acético del vinagre el que garantiza la eliminación de las manchas más difíciles, así como de los malos olores y los restos de moho.
Para utilizarlo, empieza por elegir vinagre blanco destilado. Introdúcelo en una botella con pulverizador y rocía todas las superficies del inodoro sucias, como las paredes, el borde y la base. Déjalo toda la noche. Por la mañana, friega antes de tirar de la cadena.
Con bicarbonato de sodio
El bicarbonato de sodio es un producto antibacteriano y antiséptico con propiedades beneficiosas. Por eso, los profesionales de la limpieza apuestan por este polvo blanco para limpiar toda la casa.
Para desinfectar el inodoro, vierte 1 taza en el fondo de la taza con 3 vasos de vinagre blanco. Estos dos ingredientes producen una reacción química. Déjalo toda la noche y añade 1 cubo de agua hirviendo a la mañana siguiente. ¿El resultado? ¡Inodoros que brillan por su limpieza!