Los tomates son un alimento que utilizamos con mucha frecuencia, y sabemos que su sabor fuera de temporada no es muy diferente del que tienen cuando los compramos en su periodo óptimo de maduración. He aquí una forma de conservar los tomates frescos durante 6 meses.
Ya estamos acostumbrados a poder acceder a cualquier producto alimenticio en cualquier época del año, independientemente de su estacionalidad. No hay que preocuparse si compramos fresas en diciembre o en julio. Sin embargo, seleccionar las frutas y hortalizas según la temporada es un paso importante para contribuir a un mundo más sano, económico y respetuoso con el medio ambiente, y reducir los residuos.
Además, sea cual sea la variedad, el supermercado o la fruta, a menudo comprobamos que la fruta fuera de temporada no tiene el mismo sabor que la comprada fuera de temporada. Por eso muchas personas optan por tener un huerto en casa, o dedican mucho espacio a un congelador lo suficientemente grande para guardar fruta y verdura congelada. Los tomates son una fruta que se presta muy bien a la congelación, pero hay que saber cómo hacerlo. Aquí tienes algunas formas de congelar tomates.
Por qué es importante comer fruta de temporada
Optar por frutas y verduras de temporada es sin duda una acción que repercute en nuestra salud, ya que los productos se recogen a tiempo y tienen el máximo contenido nutricional. Además, esta elección favorece la ecosostenibilidad y la preferencia por los productos locales, reduciendo el impacto medioambiental del transporte y la conservación de los alimentos.
Frutas y verduras de temporada
Preferir frutas y verduras de temporada también puede tener sentido desde el punto de vista económico, ya que estos productos suelen ser más baratos que los que están fuera de temporada.
Conservar los tomates frescos durante 6 meses
El verano es la mejor época del año para disfrutar de los tomates, ya que el mercado ofrece una amplia gama de esta fruta rica en vitaminas y de sabor incomparable. Además, existen distintas variedades de tomate entre las que elegir, en función de sus preferencias y del uso culinario que quiera hacer de ellos.
Por ejemplo, si quieres preparar una ensalada mixta, caprese, picadillo de tomate, cebolla y bacalao, gazpacho, salteado o salsa, puedes optar por distintos tipos de tomate, según las necesidades del plato que quieras preparar. Veamos cómo conservar los tomates.
Conservación de tomates enteros congelados
Puede conservar los tomates enteros congelados en bolsas de plástico herméticas forradas con papel de cocina. Para ello, basta con lavar los tomates en agua y vinagre y secarlos bien.
Tomates congelados
Una vez hecho esto, sólo tienes que introducirlos en las bolsas herméticas y hacer el vacío, ya sea con una pajita o con una máquina de vacío. Así podrás conservarlos durante 1 mes.
Tomates troceados
Para congelar tomates precortados, lávelos y séquelos bien, y después córtelos en el tamaño deseado. Colóquelos en una bandeja de horno forrada con papel sulfurizado y congélelos durante al menos una hora. Una vez congelados, sáquelos de la bandeja y páselos a bolsas para alimentos y, a continuación, métalos en el congelador. Puede conservarlos así de 3 a 6 meses.
Salsa de tomate
Esto es algo que estamos acostumbrados a hacer. Prepare la salsa de tomate como de costumbre y déjela enfriar completamente. Una vez fría, pásela a recipientes para alimentos y congélela.
Tipos de tomate
Elegir frutas y verduras de temporada es una acción que contribuye a una vida más saludable, ya que los alimentos se recolectan en el momento adecuado y contienen todos sus nutrientes. También es una acción importante para el medio ambiente, ya que nos permite disfrutar de productos de calidad, sostenibles y asequibles.