¿Se ha preguntado alguna vez qué puede ocurrir si sumerge un diente de ajo en un vaso de agua? Esto es lo que ocurre

El ajo es uno de los ingredientes básicos de nuestra cocina, y también se puede cultivar en casa. Hay un método sencillo para plantar ajos: basta con seguir los pasos y tendrás plantas exuberantes.

Esta planta aromática, muy utilizada en la cocina por sus propiedades beneficiosas, puede estar siempre a mano cultivándola en casa. Para saber cómo plantar ajos, te aconsejo que sigas atentamente las explicaciones que te ofrecemos a continuación.

Propiedades del ajo
El ajo es rico en propiedades beneficiosas para el cuerpo humano. Para beneficiarse de sus grandes propiedades, lo mejor es comerlo crudo. El ajo, de olor y sabor inconfundibles, es rico en vitaminas y minerales como el hierro, el sodio y el calcio. Al ajo se le atribuyen interesantes propiedades antifúngicas, antibacterianas, anticancerígenas, antioxidantes y antivirales.

Dientes de ajo
Tiene la capacidad de reducir los niveles de colesterol, disminuir la presión arterial y beneficiar a los huesos. El ajo siempre se ha utilizado como una auténtica medicina natural, debido a sus grandes poderes curativos. La alicina contenida en el ajo neutraliza diversos trastornos intestinales. Más concretamente, el ajo facilita la digestión, combate las lombrices y los parásitos y ayuda al hígado.

El ajo es un alimento excelente para combatir todos los problemas asociados a la mala circulación sanguínea, como hemorroides, varices y tobillos hinchados. Comer ajo crudo también es muy bueno para prevenir las enfermedades cardiovasculares, la hipertensión, las infecciones fúngicas y el colesterol. Gracias a sus propiedades antivirales, el ajo también parece ser eficaz para combatir el herpes labial.

Usos alternativos del ajo
Los dientes de ajo pueden utilizarse como repelente natural de mosquitos. Unas cuantas cabezas de ajo bastan para mantener a los mosquitos alejados de casa. Para mantener alejadas las plagas de las plantas, se pueden espolvorear dientes de ajo en el suelo y cerca de los troncos de los árboles frutales a proteger.

Frotar ajo en el pelaje de las mascotas es un valioso repelente natural contra las pulgas. Gracias a sus propiedades desinfectantes, también es muy útil para tratar el acné. Basta con picar un poco de ajo y aplicarlo sobre las zonas a tratar, con un poco de algodón, y dejar actuar. Para las infecciones fúngicas, basta con aplicar una mezcla natural de ajo y aceite de oliva.

Ajo
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Para eliminar la cal de las superficies domésticas, puede preparar un pulverizador con agua, limón y ajo. En caso de picaduras de insectos que produzcan escozor, basta con frotar la picadura con ajo para obtener un alivio inmediato. Frotar ajo fresco en las uñas también es esencial para mantenerlas fuertes y sanas. Para curar un resfriado rápidamente, los baños de vapor con ajo son muy eficaces.

Plantar ajos en agua en interiores
En general, el ajo puede plantarse en el suelo, haciendo agujeros poco profundos en los que introducir las cabezas de ajo. La mejor época para cultivar ajos es a finales de otoño o principios de invierno, y pueden combinarse con diversas hortalizas que necesiten protegerse de las plagas.

Una buena forma de cultivar ajos en casa es con agua embotellada. En concreto, se necesita una botella de plástico por cada cabeza de ajo. A continuación, hay que cortar la parte superior de cada botella, que se coloca sobre una plancha caliente para fundir los bordes.

Una vez que hayas dado forma a los bordes para que no estén afilados, llena las botellas con agua y coloca en ellas las cabezas de ajo. Es importante que el ajo entre en contacto con el agua para que puedan formarse raíces.

Las botellas con las cabezas de ajo y el agua se guardan en un lugar seco hasta que aparecen los primeros brotes. Al cabo de unos días, se verán los brotes, por lo que las cabezas de ajo están listas para plantarse en la tierra. Las plantitas de ajo deben trasladarse a macetas o al suelo y regarse durante unos meses para que crezcan lozanas.