En el mundo actual de la sostenibilidad y la conciencia ecológica, el cultivo de hortalizas a partir de restos de cocina se ha convertido en una tendencia cada vez más popular. Entre estos restos de cocina reutilizables se encuentra el bok choy, una verdura de hoja verde versátil y nutritiva que es un alimento básico en muchas cocinas. En este artículo, te guiaremos por el proceso de cultivo de bok choy en casa siguiendo un método de dos pasos: primero, germinarlas en agua y, después, trasplantarlas a botellas de plástico recicladas de 5 litros llenas de tierra. Este método no sólo es respetuoso con el medio ambiente, sino que también es un proyecto interesante para los principiantes que quieran explorar el mundo de la jardinería.

Sección 1: Germinar Bok Choy en agua

¿Por qué en agua? Cultivar bok choy en agua es un excelente punto de partida, ya que permite observar fácilmente las fases iniciales de crecimiento y garantiza un desarrollo más rápido de las raíces.

Selecciona tus sobras: empieza por elegir una base de bok choy fresca con las raíces aún intactas. Corta unos 2,5 o 5 centímetros por encima del extremo de la raíz.
Prepara un recipiente: busca un vaso o un tarro y llénalo con unos 2,5 cm de agua. Asegúrate de que el extremo cortado del bok choy sobrante queda sumergido mientras que la parte con hojas permanece por encima de la línea de flotación.
Colocación e iluminación: Coloque el recipiente a la luz indirecta del sol. Esto favorecerá el crecimiento de las raíces. Cambia el agua cada pocos días para mantenerla fresca.
Desarrollo de las raíces: En cuestión de días o semanas, notarás que empiezan a formarse raíces desde la base de los restos de bok choy.
Sección 2: Trasplante a botellas de plástico reciclado

¿Por qué botellas de plástico recicladas? Trasplantar los restos de bok choy a botellas de plástico reciclado es una forma ecológica de proporcionarles un entorno de crecimiento estable. Estas botellas son fáciles de conseguir y este método permite unas condiciones más controladas en comparación con la plantación directa en el suelo.

Prepara las botellas: Limpia y desinfecta las botellas de plástico de 5 litros. Corta el tercio superior y deja el fondo como recipiente para plantar.
Prepara la tierra: Rellena el fondo de la botella con tierra de calidad para macetas, dejando un poco de espacio en la parte superior para plantar.
Trasplante: Haz un pequeño agujero en la tierra e introduce los restos de bok choy, asegurándote de que las raíces queden bien cubiertas de tierra. Riega bien la tierra después de plantar.
Mini invernadero: Coloca la parte superior del frasco (sin la tapa) sobre el fondo para crear un mini invernadero, favoreciendo la humedad y protegiendo tus plantones.
Sección 3: Mantenimiento y cuidados

Riega la bok choy en botellas de plástico con regularidad, manteniendo la tierra húmeda pero no empapada.
Asegúrate de que los recipientes reciban luz solar indirecta y mantén una circulación de aire adecuada para evitar la aparición de moho.
Al cabo de unas 4-6 semanas, el bok choy estará listo para cosechar. Empieza por las hojas exteriores y deja que las interiores sigan creciendo.
Conclusión: Cultivar bok choy en casa a partir de los restos de la cocina no sólo es respetuoso con el medio ambiente, sino también una forma excelente de tener un suministro constante de verduras frescas y nutritivas. Este método en dos pasos, empezando con agua y luego trasplantando a botellas de plástico reciclado, hace que el proceso sea accesible para principiantes y produce resultados deliciosos. Aprovecha la oportunidad de conectar con tus alimentos, reducir los residuos y disfrutar de la satisfacción de un bok choy casero.